Durante la realización del Comité Carcelario y Penitenciario, las autoridades de control analizaron la situación de prestación de servicio de salud a los reclusos del departamento e hicieron un llamado a la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios -USPEC- y al gobierno nacional para que hagan cambios en el modelo de salud que se presta a los internos.
El secretario de Gobierno de Caldas, Carlos Alberto Piedrahita explicó las razones por las que, a su juicio, ni en el departamento ni en el país está funcionando este modelo de salud.
“Hoy vemos que el modelo en salud que rige desde el nivel nacional no se ha venido aplicando bien en nuestro territorio y la razón es que este modelo ha sido construido en relación al nivel de riesgo de las cárceles y no en relación a la cantidad de población de cada centro penitenciario”, explicó.
Como ejemplo, el funcionario expuso la situación de la cárcel La Blanca de Manizales. La que, según su informe, tiene capacidad para 600 reclusos y hoy alberga 1.500. "Allí hay un médico por algunas horas, cuando debería haber un profesional permanente para atender
Como conclusión de este comité, se le solicitó a la Procuraduría, no solo Regional sino Nacional, una medida preventiva para que las organizaciones implicadas en este tema rediseñen el modelo de atención en salud de las personas privadas de la libertad en Caldas, de manera que se les garantice este derecho fundamental.